El 24 de Marzo se conmemora el Día Nacional por la Memoria, Verdad y Justicia, en recuerdo del último golpe cívico-militar en Argentina en 1976, que desembocó en una dictadura de siete años.
La imágen editada por El Diario en Tucumán, fue realizada en base al mural que Mariano Campero supo hacer pintar en un paredón en la avenida Pte. Perón. En ella el intendente de Yerba Buena posa de espaldas a la imagen de Ernesto Sábato y Raúl Alfonsín, ambos emblemas de la lucha por los DDHH.
¿Quién diría que poco tiempo después, Mariano Campero llevaría a su apellido a figurar en todos los medios al lado del hijo del genocida Antonio Domingo Bussi (condenado y fallecido), Ricardo Argentino Bussi?
Es que Mariano Campero dejó hace unos años de ser ese aguerrido joven concejal y militante de las ideas que son caras para radicalismo. Hoy Campero es otro. Su elección de aliarse con Ricardo Bussi, presidente de Fuerza Republicana S.A., lo sitúa en un espacio de derecha, que en Tucumán y especialmente en Yerba Buena conserva un buen caudal de votos.
Campero mutó y no lo hizo por convicción, sino por conveniencia. Su supuesta ideología que tomaba a líderes de la UCR como Raúl Alfonsín, como inspiración; fue cambiando día a día, elección tras elección, netamente hacia la derecha. Con esa decisión, Campero capitaliza a un vasto y nostálgico electorado que ni siquiera acepta que durante los años ’70 en nuestro país y especialmente en Tucumán, se inició un período oscuro de violencia institucionalizada e imposible de negar.
Resulta obsceno y ofensivo hacia las figuras de Sábato y Alfonsín, que el intendente yerbabuenense se atreva a posar frente al mural en la Av. Perón con esos rostros de fondo. Ése, es el porqué de la foto de portada.
Mariano Campero ya había «sacado los pies del plato«, cuando decidió aferrarse al vagón de cola del fracasado macrismo. Lo había dicho ya Dn. Raúl Alfonsín: «El límite es Macri«. Pues Campero no solo cruzó ese límite, sino que está muy cerca de ser expulsado de la UCR, tal como se dio a conocer en esta semana.
Jorge Sappia, presidente de la Convención Nacional de la UCR declaró que: «Lo veo muy mal y suscribo totalmente la declaración del vicepresidente de la convención de Agustín Campero en este sentido», comenzó explicando el dirigente radical.
«Yo creo que se pueden hacer coaliciones electorales de todo tipo. No estoy en contra. Creo que las alianzas deben tener una base programática muy clara. Las alianza deben hacerse en el marco de un concepto democrático absoluto y total. Y yo no me podría aliar con quien es la expresión de la antidemocracia, de la violación de los derechos humanos, de la tortura y de la negación de la libertad», cuestionó Sappia.
La ambición de Campero no tiene freno y este 24 de Marzo en que se conmemora el Día Nacional por la Memoria, Verdad y Justicia, Campero debate consigo mismo, por acción u omisión, de qué lado está. Su posición significará un antes y un después en su carrera política.