La tragedia de Noelia, la esposa de Bruno Ruben, fallecido a raíz de haber chocado con un «lomo de burro» en Yerba Buena

Existe una trillada frase que dice «si puede evitarse, no se trata de un accidente«. La misma aplica perfectamente para el caso del camarógrafo Bruno Ruben, que falleció a consecuencia de haber colisionado en su moto Honda Wave 110, contra un lomo de burro (lomo de cebra) sin señalización adecuada en la Av. Presidente Perón (esquina Moreno) en Yerba Buena. 

En la fatídica madrugada del domingo 22 de Octubre, Bruno iba a perder la vida, pero su caso iba a quedar sin ser debidamente atendido por los medios de comunicación que volcaron su atención al crimen aberrante de Valentín Villegas de 15 años en manos de una bestia asesina al atardecer del mismo día.

Desde la dirección de El Diario en Tucumán, nos habíamos comprometido con Noelia (esposa de Bruno) a brindar un merecido «resarcimiento» en la cobertura de lo que los medios por lo general denominan «su caso«. Queríamos atender esta tragedia desde todas sus perspectivas, a razón de que Bruno fue víctima de una muerte absurda que no debió suceder.

Ese día, él retornaba temprano (Hs 02.00 AM) -teniendo en cuenta su actividad como camarógrafo y fotógrafo- de realizar una cobertura en vivo para las pantallas del salón, de una fiesta de quince años en un espacio para eventos. Más adelante se comprenderá el motivo por el que señalamos que «se retiró temprano esa noche trágica«.

La responabilidad municipal

Pocos conocen que la Avenida Presidente Perón en Yerba Buena, continúa con su status de «Ruta Provincial«, por lo que es órbita de Vialidad de la Provincia. En su momento y a raíz de la construcción de la rotonda en su intersección con calle Bascary, el entonces intendente Daniel Toledo, recibió una Carta Documento por parte del titular de Vialidad Provincial, deslindando responsabilidades. Esta vía, como también la Av. Solano Vera y muchas otras en la provincia, integran un extenso listado de «rutas» a ser trasferidas a los municipios, con su correspondiente presupuesto.

Cuando investigamos lo referente a la construcción de lomos de burro, nos dimos con la sorpresa de que están taxativamente prohibidos por la ley. Además existen pedidos de inconstitucionalidad sobre su implementación.
En realidad su tratamiento y señalización se corresponden con el de un «obstáculo» (tal cual lo sería la mampostería de hormigón en una excavación en la vía pública). Transcribimos un fragmento de uno de los artículos al respecto.

http://nicolaszullo.com.ar/estudio/publicaciones/inconstitucionalidad-del-lomo-de-burro/

«La Ley no reglamenta la construcción ni la instalación de las lomadas o lomos de burro, lo que convierte a estos dispositivos en obstáculos expresamente prohibidos por la propia Ley Nacional de Tránsito (N°24.449) en su artículo 23 — OBSTACULOS: “Cuando la seguridad y/o fluidez de la circulación estén comprometidas por situaciones u obstáculos anormales, los organismos con facultades sobre la vía deben actuar de inmediato según su función, advirtiendo del riesgo a los usuarios y coordinando su accionar a efectos de dar solución de continuidad al tránsito. Toda obra en la vía pública destinada a reconstruir o mejorar la misma, o a la instalación o reparación de servicios, ya sea en zona rural o urbana y en la calzada o acera, debe contar con la autorización previa del ente competente, debiendo colocarse antes del comienzo de las obras los dispositivos de advertencia establecidos en el Sistema Uniforme de Señalamiento… Durante la ejecución de obras en la vía pública debe preverse paso supletorio que garantice el tránsito de vehículos y personas y no presente perjuicio o riesgo… El señalamiento necesario, los desvíos y las reparaciones no efectuadas en los plazos convenidos por los responsables, serán llevados a cabo por el organismo con competencia sobre la vía pública o la empresa que éste designe, con cargo a aquéllos, sin perjuicio de las sanciones que se establezcan en la reglamentación por los incumplimientos.

La intendencia de Yerba Buena decidió no obstante, la instalación de cuatro de los llamados «lomos de cebra» y de grandes dimensiones en Av. Pte. Perón y su intersección con calles Bascary y Moreno (hablamos solo de ellos  por los «accidentes» que ocasionaron con grandes daños materiales y víctimas fatales y con graves secuelas).

La Secretaría de Gobierno del Municipio, a cargo de Lisandro Argiró, es aquella a la que le compete la resolución al respecto de estas construcciones. Nos consta que en el caso del choque que se produjo entre la motocicleta de Bruno Rubén (fallecido en el accidente) y uno de estos lomos, en la intersección de calle Moreno, el secretario del área estaba al tanto de que el mismo no cumplía condiciones básicas para ser habilitado por la carencia de elementos de seguridad que advertían de su presencia:

  • Balizas LED color amarillo.
  • Bastones a una distancia apropiada antes de cada reductor
  • Cartel de VELOCIDAD MAXIMA 20
  • Pintura amarilla vial reflectiva
  • Línea peatonal blanca refractaria en la parte superiore del reductor de velocidad
  • Cartel de PRECAUCIÓN A 50 m del Lomo de Burro
  • Carteles tipo cabecera de puente de 1m de ancho por 2 m de largo.
  • Cartel de CRUCE PEATONAL
  • Otros

Solo algunos de ellos estaban presentes el día del choque fatal en el que Bruno perdió la vida. Esa madrugada fatal, el lomo de burro de Av. Presidente Perón esq. Moreno era casi invisible bajo la lluvia.

El secretario del área, Lisandro Argiró, decidió ordenar la habilitación del mismo, a pesar de la carencia de señalizaciones mínimas, encima en dicha madrugada lloviznaba, lo que convertía a esta estructura en una verdadera trampa mortal.

Desde la Defensoría del Pueblo de la Nación, existe una recomendación de reemplazo de estos lomos de burro por medidas de señalización y advertencia que permitan el ordenamiento del tránsito y cumplimiento de velocidades máximas.

Recomendaciones de la Defensoría del Pueblo de la Nación, sobre el reemplazo de los lomos de burro.

ARTICULO 1º.- Recomendar a la DIRECCIÓN NACIONAL DE VIALIDAD y al ÓRGANO DE CONTROL DE LAS CONCESIONES VIALES que arbitren, dentro del marco de sus competencias, los medios conducentes para que los «lomos de burro» sean inmediatamente retirados y para que, en su reemplazo, se disponga la colocación de una o varias de las medidas de seguridad autorizadas; a saber: a) colocación de carteles de velocidad máxima; b) instalación de semáforos, en aquéllas arterias cuyo volumen de tránsito lo justifiquen; c) colocación de carteles de «ceda el paso» en las calles que atraviesan la ruta o sobre la ruta, según corresponda; d) colocación de carteles que indican proximidad de un establecimiento escolar, deportivo o de gran afluencia de personas; e) construcción de puentes peatonales; f) colocación de bandas sonoras logarítmicas, para avisar a los conductores que deben reducir la velocidad; g) señalización horizontal y vertical en general; h) presencia efectiva de personal policial municipal a cargo del control de la circulación vehicular, verificando, como mínimo, los siguientes aspectos: velocidad máxima, estado de los vehículos, alcoholemia, detención en zonas no autorizadas, circulación de vehículos con tracción a sangre, entre otros.  (Hacer click en letra azul para acceder al texto).

En la mañana de la muerte de Bruno Ruben, el intendente Mariano Campero se expresó en el programa que el matutino La Gaceta emite por un canal de cable, que Bruno «había tomado gran velocidad, huyendo de un control de alcoholemia«. «¡MENTIRA!», dice Noelia, la esposa de Bruno Ruben.

Bruno Rubén no había sido sepultado aún, no obstante el intendente de Yerba Buena, Mariano Campero salió al aire en el programa de La Gaceta y sin un mínimo de sensibilidad se animó a afirmar que Bruno había intentado «huir a toda velocidad» para evitar el control de alcoholemia que según él se realizaba en el momento, colisionando con al lomo de burro.

Pues eso es no solo una canallada, sino que nos consta (que lo desmientan los funcionarios actuantes) que ese día no solo NO SE REALIZARON CONTROLES DE ALCOHOLEMIA, SINO QUE LA COMITIVA DE TRÁNSITO Y LA GUM, SE TRASLADABAN DE CONTROLES MÓVILES HACIA OTRO DESTINO CUANDO SE TOPARON CON EL ACCIDENTE DE BRUNO RECIÉN OCURRIDO. (El Diario en Tucumán posee testigos que pueden rubricar lo dicho). O sea, el intendente Campero, mintió a los periodistas de La Gaceta y a la opinión pública.

Como si esto no fuese suficiente, el secretario de Gobierno de Yerba Buena, Lisandro Argiró, disparó de manera cruel, que «El joven manejaba alcoholizado«. ¡Vaya qué descaro echar culpas a quien ya no podía defenderse y encima sin esperar los resultados de la autopsia. Además de irresponsable, al haber autorizado la habilitación del lomo de burro, el funcionario mostró su peor costado y falta total de escrúpulos. Recordamos; Bruno Ruben no había sido sepultado todavía.

En las sucesivas notas de La Gaceta, podremos leer notas en las que se puede leer entre líneas «una manito» (para variar) al intendente y funcionario de Yerba Buena; una «sana costumbre» que tiene dicho medio desde hace unos años…
«…Investigan las causas. Alta velocidad e imprudencia«, subtitula la nota de referencia. ¿Se refería a Bruno o era solo en términos genéricos? La impresión que se lleva el lector a primera vista, es que se refería a Bruno. Eso no se hace sin una motivación.

 

Está totalmente claro que la municipalidad de Yerba Buena tendrá que afrontar más de un juicio al respecto, que va a perder sin dudas, sea el planteo que sea. Ya existen antecedentes judiciales casi exactos a los de Bruno contra la Municipalidad de El Pilar en la provincia de Buenos Aires por un accidente contra un lomo de burro. Así lo consigna el medio «El Judicial» en una nota titulada «Burrada de las señalizaciones viales» (Acceder a la nota haciendo Clik en la letra azul). Sentencia

En un principio hicimos referencia a que Bruno volvía temprano (dos de la mañana) de realizar una cobertura de uno de los videos en una fiesta de 15 en un salón de Yerba Buena. El secretario de Gobierno de Yerba Buena, Lisandro Argiró lo acusaba de manejar alcoholizado y por eso haberse llevado por delante al OBSTÁCULO, que él funcionario autorizó a que se habilitara para su uso a pesar de no estar debidamente señalizado.

La justicia deberá dirimir al respecto de las responsabilidades civiles y por qué no penales de quienes actuaron en la construcción y obviaron señalizar ese lomo de burro.

A Bruno, con sus 32 años a cuesta lo esperaba su mujer Noelia Paola Molina Vallés, de 28 años y sus cuatro hijos (Francisco Nicolás Rubén, de 14 años;
Morena Jordana Ruben, de 11; Luis Igancio Ruben, de 6 años y Bruno Ramiro Rubén, de 3 años) en casa; es por ello que volvía apenas pudo a Villa Mariano Moreno en donde residía. Todavía esperan a su padre que jamás llegará. Lo hacía inclusive bajo la lluvia en una moto. Así encontró la trampa mortal que le iba a costar la vida.

Este es el testimonio que en exclusiva dio su mujer, Noelia; a El Diario en Tucumán: