ESTAFAS TELEFÓNICAS A JUBILADOS Y RECEPTORES DE PROGRAMAS SOCIALES (TESTIMONIOS)

Las versiones sobre estafas telefónicas a quienes perciben montos extras en sus asignaciones y sobre todo a jubilados, empezaron a circular la primera semana del mes de Mayo. Fue así que llegó a la redacción de El Diario en Tucumán, el primer audio al respecto.

En el mismo se escucha una conversación entre una mujer y un sujeto que intenta convencerla de que es beneficiaria de un aumento extra otorgado por el ANSES y que debe proporcionarle determinados datos para «cerrar» la operación de cobro.

En el audio se percibe la insistencia del sujeto y la reticencia de la mujer a proporcionar datos extra. Al mismo tiempo, la mujer que está siendo víctima, realiza preguntas que, si bien son respondidas por el delincuente, causan una evidente duda y confusión a la mujer en cuestión, ante argumentación esgrimida por el delincuente.

En los casos, siempre se hace referencia a que el llamado es realizado por un empleado del ANSES y que su «misión» es verificar determinados datos personales e indicar el supuesto modo de proceder por parte de la víctima, a fin de recibir el «beneficio«.

Como puede escucharse claramente, la mujer se sorprende por el hecho de que el delincuente no solo tiene su número de teléfono disponible, sin otros datos que debieran ser absolutamente privados.

El otro caso que ya se encuentra judicializado y en investigación, es de una persona de 73 años a quien llamaremos Juan Carlos.
Juan, se comunicó la semana pasada con la dirección de El Diario en Tucumán y nos contó su historia reciente, misma que consta en la denuncia realizada ante la división «Delitos Telamáticos» de la Policía.

Juan Carlos, el damnificado, refiere que la persona que tomó contacto con él, decía pertenecer al ANSES y que lo notificaba que era «beneficiario del bono de $10.000. otorgado por el Gobierno Nacional y que para poder hacer efectivo el depósito, tenía que llegarse hasta un cajero del Banco de Santiago del Estero y generar una clave «Token«.

Además con indicaciones confusas pero demostrando conocer muchos de sus datos privados y personales, lo convencieron de que el procedimiento referido era de tono «oficial«.

Así mismo, Juan Carlos, pudo luego consultar el saldo de su cuenta en la que verificó que solo le quedaban «monedas«. Atento a esto tomó contacto con el gerente de su sucursal en el Banco de Santiago del Estero, mismo que le comunicó que no podía acceder a todos los datos del CBU al que le habían «inducido» a realizar la transferencia. La misma habría sido realizada a una cuenta del Banco Galicia. Como suele suceder con los clientes de las entidades bancarias, la redacción de El Diario en Tucumán, no logró contactar a ningún responsable de área de ambas entidades.

Asentada la denuncia, se determinó que la causa quedó en manos de la Fiscal del Juzgado de 1ª nominación, Dra. Miriam Martínez.

A medida de que El Diario en Tucumán procesa esta información, llegan a nuestra redacción -con idéntico proceder- nuevos casos de estafas. Esta vez, ya no a personas de edad avanzada, sino que no necesariamente ya, se trata de quienes hayan recibido algún beneficio, sino a cualquier persona.

En la siguiente imagen, puede observarse la clave «Token» a la que indujeron a realizar los estafadores a Juan Carlos.

En un detalle obtenido por el estafado, se pueden observar los movimientos efectuados en su cuenta bancaria en donde percibe su jubilación.

Más allá de el enorme daño realizado a Juan Carlos, creemos necesario que se tomen todas las medidas pertinentes lo antes posible y que la fiscalía actuante, proceda con absoluta celeridad.

Creemos que tanto las entidades bancarias involucradas en dicha estafa y el ANSES, como organismo oficial del Estado, deben realizar una masiva comunicación que ponga en alerta a la sociedad y a sus clientes sobre esta deleznable estafa que apunta justamente contra quienes están recibiendo beneficios estatales por integrar uno de los sectores más vulnerables.

Al cierre de esta nota y habiéndonos comunicado desde la dirección de EL Diario en Tucumán, con la División de Delitos Telemáticos, se nos solicitó -planteada nuestra inquietud- que realizáramos una llamada pasados los 15 minutos posteriores a la misma. Dado el plazo, realizamos llamados sucesivos durante UNA HORA pero nunca más logramos comunicarnos al número de dicha repartición policial.

El diario en tucumán, solicita a los colegas y a los lectores en general, que compartan masivamente esta nota para alertar a la ciudadanía, hasta tanto el ANSES y las entidades bancarias involucradas y otras que realicen pagos de jubilaciones y asignaciones extra, procedan a realizar una campaña de difusión al respecto, dando a conocer el accionar de estos estafadores seriales.