VATICANO.- Dos ex responsables del banco Vaticano serán juzgados por lavado de dinero, Paolo Cipriani, ex director general del banco, oficialmente llamado Instituto para las Obras de Religión (IOR), y su adjunto Massimo Tulli, están acusados en un caso que llevó a decomisar unos 32 millones de dólares.
La prensa italiana cita a fiscales según los cuales Cipriani y Tulli aprobaron un pago sospechoso mientras que el ex presidente del banco Vaticano, Ettore Gotti Tedeschi, intentó por el contrario aplicar las leyes contra el blanqueo.
Los dos hombres tuvieron que renunciar el año pasado tres días después de que un contable del Vaticano, monseñor Nunzio Scarano, que tenía cuentas en el banco Vaticano, fuera detenido en Italia por transferencias sospechosas.
El banco Vaticano, que gestiona las cuentas de religiosos y congregaciones católicas en todo el mundo, tiene muy mala reputación, pero el papa Francisco ha prometido luchar contra la corrupción y aplicar las leyes internacionales.